¿Descubriste que te engañaban, te pidieron perdón y te
juraron que nunca más volverá a pasar? Una periodista que ya pasó por el duro
camino de la traición amorosa entrega las pautas para saber si vale la pena o
no perdonar y seguir adelante con la pareja.
“Yo viví (lo que es ser engañada). Y logré cruzar al otro
lado con mi alma intacta”, asegura la periodista y dibujante Tracy Schorn en su
blog"Chump Lady”.
Para Schorn, parte de esta recuperación psicológica se basa en saber si confiar o no en una pareja que ha sido desleal, pero que ruega por el perdón y por una segunda oportunidad. ¿Es genuino ese arrepentimiento o no? La bloguera dio unas simples pistas para distinguir un verdadero arrepentido de un charlatán.
-Es humilde: El infiel debe saber su
lugar en las prioridades, si está realmente arrepentido; esto quiere decir que
no será necesario recordarle a cada rato que sus necesidades no estarán en
primer lugar por mucho tiempo, hasta que la persona engañada lo estime
conveniente, según sus necesidades de curación.
“El verdadero arrepentimiento es tener una conciencia profunda de que se rompió una confianza sagrada, y que (el engañado) no está obligado/a a la reconciliación”, escribió Schorn.
“El verdadero arrepentimiento es tener una conciencia profunda de que se rompió una confianza sagrada, y que (el engañado) no está obligado/a a la reconciliación”, escribió Schorn.
-Tiene iniciativa: Para
la bloguera, un verdadero infiel arrepentido agenda de forma espontánea una
cita con un terapeuta de pareja. Y no se le tiene que pedir ni mucho menos
manipular para que siga los consejos del especialista. Mientras que el falso
arrepentido, espera a que sea la pareja quien pida la hora con el profesional,
y luego alega que está muy ocupado para ir a la sesión.
-Es honesto: Según
Schorn, un real arrepentido entrega una verdad a prueba de todo. Es decir, es
capaz de contestar a todas las inquietudes de su pareja engañada, una y otra y
otra vez. Jamás responderá a una pregunta con un “no sé”, y mucho menos con un
“éramos solo amigos”.
-Es paciente: El
arrepentido genuino sabe que arreglar su relación después de una infidelidad,
requiere de tiempo y lamentablemente, el resultado puede ser bueno o malo,
según se logre como pareja sanar las heridas.
Aquel
o aquella que no sea real en su arrepentimiento, espera que su pareja engañada
supere el tema de un día para otro, solo con decirle que siente haberla/lo
engañado.
-Da la cara: Quien de verdad está arrepentido por haber sido
infiel se hace cargo de su responsabilidad y entiende que el engañado hable de
lo sucedido con otras personas, ya que necesita el apoyo de su entorno para
superar la crisis.
“(El
falso) quiere que protejas su imagen (…) te culpa, diciendo ‘los dos hicimos
cosas en este matrimonio que me llevaron a ser infiel’. (El falso) minimiza el
asunto y se ofusca”, explica Schorn.
-Se hace cargo: Cuando
el arrepentimiento es verdadero, y por más que el matrimonio o la relación se
haya acabado, “el verdadero arrepentido paga tus gastos legales (abogados, por
ejemplo), te compensa a ti y a tus hijos por cada centavo gastado en su
infidelidad o infidelidades. Reconoce que hubo pérdidas de tiempo y financieras
tan reales como las emocionales. El tiempo y las heridas no puedes ser
recompensadas, pero la pérdida de dinero sí. Un verdadero arrepentido dice ‘es
lo menos que puedo hacer’”, explica la bloguera.
Fuente: http://www.elpais.com.uy/vida-actual/seis-pistas-infiel-arrepentido.html